Subastada

Los demonios tomaron posesión del mundo. Los humanos, ante tan repentino ataque por parte de criaturas para ellos inexistentes, no pudieron defenderse, pero unos pocos lograron sobrevivir y escapar, ocultándose. Ahora la caza de humanos era un deporte para los demonios, pues estos eran capturados y vendidos en las subastas llamadas "Venta de mascotas". Los humanos eran esclavos, comida, conejillos de indias, lo que sea que sus nuevos dueños quisieran. Sin embargo, los demonios no contaban con que los humanos aprendieran a matarlos, y una resistencia nació, un grupo de humanos que se negaban a arrodillarse ante esos monstruos, el jefe de ellos, Seiji, el más famoso cazador de vampiros que jamás haya existido, se vuelve el enemigo más grande del rey vampiro KarlHeinz, y sus hijos, que intentarán complacer a su padre, buscaran la manera de conseguir la ubicación de Seiji y su ejército. Sin embargo, en una redada, la mejor comandante e hija única de Seiji, es capturada por unas víboras carroñeras al ser tomada como una refugiada cualquiera.

Por su belleza y ferocidad, Yui es llevaba a la venta de mascotas de mejor élite de Tokyo, dónde los demonios más poderosos, empresarios, príncipes, ministros, se reúnen y compran a sus mascotas para satisfacer sus más sádicos deseos. Esa misma noche, KarlHeinz le ordena a sus hijos que se tomen la noche libre, sin contar que marcó su propio destino al hacerlo.

Nuestro amados vampiros pelearán por la posesión de la nueva mascota real, sin saber su origen y descubriendo nuevos sentimientos que los llevarán a cuestionar su lealtad a su padre.