Déjame amarte

Manuel Mijares siempre fue el típico macho sin remedio, de esos que pretenden llevarse a cuanta mujer se le cruce por delante directo a la cama. Y la mayoría de la veces lo lograba, sin embargo había una mujer que no había caído en sus "garras". Lo que hacía que la deseara aún más.

Esa Mujer es Mayte Lascurain, si Mayte, su amiga de años. La que le confesó su amor una y mil veces, a solas y hasta delante de las camaras. Pero ella tenía algo que las otras con las que Manuel se revolcaba no. Ella tenía dignidad y no estaba dispuesta a perderla o peor aún, perderse a sí misma por una simple noche de pasión. Manuel por su parte, no perdía oportunidad alguna para intentar seducir a Mayte, pero ella sabía que él solo quería sexo. Mientras que lo que ella quería era su total y completo amor.