aferrandose a una inestable sonrisa floja, esas personas parecen realmente felices. no juzgaría a este mundo por ver y creer con la seguridad de su propio criterio, después de todo, la ignorancia es uno de los factores principales de la felicidad. Lo mires por donde lo mires todos tenemos la necesidad de recurrir a ello...una pequeña pizca de azúcar para endulzar el amargo café que te mantiene despierto. puedo decir que yo, una persona sin historial ni significado que anhela comprender el mundo sin saber tan siquiera reconocerse así mismo, lo sé muy bien. ¡cuantos miran mi sonrisa y se sienten desdichados! ¿qué no saben que para ser o intentar ser feliz(aunque sea un poco ) hay que sonreir? O al menos en parte claro está. Mis mañanas tienen tanta azúcar que ya no siento el sabor del café y solo su olor me hace estar medio cuerdo. Yo pienso que nuestra necesidad de esa dosis de azúcar es lo que realmente define nuestra verdadera felicidad, mientras menos necesites, más pleno eres. Aunque hay personas que la necesitan, pero que por alguna razón tal vez muy personal prefieren tomarse el trago amargo y simplemente existir. Esas personas que solo salvandolas vuelven a sonreír sinceramente. Por mi parte, soy del otro lado que se quiere salvar así mismo. Aunque la posibilidad sea de un 0,1% seguiré al tope de azucar para conseguirlo. Pero la vida tiene sus propios ritmos y pasos ¿qué pasa cuando dos personas de distintos lados se topan?.
¿Que pasa cuando dos familias son enemigas,? Freen Sarocha y Rebecca Armstrong tendrán que luchar en contra de sus apellidos... y ver si el amor vencerá o podrá más el odio...