Lily Palmer ya no es la chica alegre, inocente que va por la vida de manera despreocupada. Mel tampoco es el chico de oro de la universidad que sueña con ser reconocido por algo más que el fútbol. Sus caminos ser han separado, una tragedia ha sacudido todo su mundo. A pesar de los años y las dificultades que les pone la vida, siete años después Lily regresa a Baltimore dispuesta a encarar un nuevo comienzo. Mel ya no es el que era. Lily tampoco es la joven inocente del pasado. Ambos se han convertido en extraños.... Lily quiere superarlo. Mel quiere a toda costa deshacerse de ella. Hay recuerdos que nunca se borran, señales que están en el aire, marcándonos el camino sin desaparecer. Hay amores que nunca mueren y siempre perduran.