Emma Miller ha trabajado durante dos años como la asistente personal de la gran empresaria y diseñadora Jenna Stone y eso ha sido un récord, ya que su jefa es extremadamente calculadora, fría y fastidiosa. Ninguna de sus anteriores asistentes ha durado más de un mes. A pesar de todo, Emma quiere conservar su trabajo no solo por la buena paga, sino que es buena en eso, pero que hará cuando su trabajo esté en riesgo porque un estúpido y arrogante empresario se niegue a venderle lo que Jenna-su jefa- más quiere en ese momento. Que pasara cuando Emma se entere de que él empresario es el mismisimo Blake Williams, el que la atropello apenas hace un mes.