Nuestro protagonista reencarno en el mundo de DxD con el nombre de Tatsumi. El como a todo un otaku se alegro al saber que reencarno en el mundo de anime, el problema es que no tuvo ningun dedo de oro. Lo unico bueno es que no se cansaba facil y era inteligente Ya sabiendo lo que esperaba entreno arduamente ya que no tenia conocimiento magico ni nadie que lo ayudara mas que su abuelo...que no es tan normal.