En una tierra más allá del horizonte, yase la leyenda de un príncipe que nació con un don que a la vez es su condena. Había nacido con el poder de comvertirse en un dragón, era un poder magnifico pero a la vez peligroso por que estaba ligado a sus emociones, si él se enojaba, la bestia que yacía en su interior se liberaba y todo rastro de cordura era olvidado para convertirlo en un auténtico monstruo. Cuanto más crecía, más fuerte era su poder y más incontrolable se volvía. Los años pasaron y su resistencia era cada vez menos para poder controlar a la bestia. Pero un día, después de recibir la noticia de que se casaría con la hija del rey de otro reino para detener la guerra, el enloqueció, desde pequeño lo habían controlado para evitar que el dragón en su interior despertara pero esa fue la gota que derramo el vaso. En un arranque de ira desenfrenada dejo que la bestia que aguardaba en su interior se liberara, dejándole completamente el control a su lado animal. En el momento en que lo hizo, el dragón acabo destruyendo el reino matando a cada habitante que se encontraba ahí incluso a sus propio padres. Cuando retomo la cordura y al ver su reino en ruinas y a sus padre muertos una gran culpa lo invadió y así, con la poca cordura que le quedaba se encerró en lo que antes era su palacio sin ningún contacto con el mundo. Con él tiempo esa historia fue abandonada en el olvido pero no antes de que el príncipe de aquel reino se ganara el apodo de "El Príncipe Dragón"