Nunca, pero nunca, desees a la hija de tu hermano adoptivo, pero sobre todo no la lleves a la cama. *** Vladimir Antonov sabe que no puede tenerla, que no puede poseerla y menos desearla, ella es lo único que le queda, luego de que la vida se encargará de arrebatarle a todos los que una vez amo, pero cuando una noche entra en casa y por casualidad la ve tocándose a sí misma, todo cambia. Kira tiene una cosa clara, Vlad es solo de ella, ninguna mujer puede tenerlo más que ella y más ahora que los últimos acontecimientos, los han llevado por un camino de tentaciones prohibidas. El deseo pudo haber encendido solo una llama, pero en realidad prendió una hoguera de pasión, que tienta con consumirlo todo a su paso. Contenido violento y sexual, explicó (+18) Prohibida cualquier copia y/o adaptación de la historia.