Victoria tuvo la intención de que fuese algo momentáneo, aquello que se convirtió en algo enfermizo. Comenzó a depender de él. Tal vez no fue del todo capaz de controlar la situación. Tal vez él nunca tuvo intenciones malas, tal vez ella lo quería. Tal vez, ella nunca debió de conocerlo esa noche. Ella siempre tuvo esto presente: los monstruos sí existían, eran reales. Ella los conocía perfectamente pero, jamás (hasta entonces) trató con ninguno. Fue una desgracia. Historia completamente mía. No copies ni adaptes, Usa tu propia imaginación, pon de tu propio esmero. #NoalPlagio. Todos los derecho reservados. Mariana R. ©