Una taza rota reconstruyendose de forma lenta. Asi fue como Helen, paso de estar muerta a vivir de nuevo. O al menos, asi fue como todos en el aquelarre, lo describieron. Helen Mary Williams, descendiente del anterior sumo sacerdote de la iglesia de la noche. Se caso con el discípulo menor de su padre, quien conspiraria para matarle y ocupar su puesto, años después. Algo que no pasaria desapercibido ante los ojos de Satán. Después de todo, el les dio poderes, una vida mas larga que la del promedió y para algunos, riqueza. Le debian obediencia, respetó, en especial por los lideres que él mismo había elegido. Antes de que Mary regresara a la vida, su esposo, Edward Williams, hizo del aquelarre un lugar opresivo para las brujas. Editando y agregando reglas absurdas a su conveniencia. Lucifer cansado, vio no solo la oportunidad de castigarle, si no que, era un lugar apropiado para el desarrollo de sus planes. Helen, hacia mucho que habia muerto y su alma había pasado a formar parte de su ejercito, como un demonio menor. No tenia la capacidad, ni el poder, para poseer un cuerpo y revertir su proceso de descomposición. Necesitaba de un demonio mayor. Pero, realmente no confiaba en ninguno. Eso, hasta que Beelzebub entro en su oficina, justo cuando su mete hizo click. Una sincronización perfecta. Beel, no estuvo de acuerdo con la idea en un inicio, ya tenia suficiente supervisando el infierno, como para hacerse cargo de una nueva tarea. Al final, terminó accediendo, al escuchar los planes que Lucifer tenia en mente. Y asi fue como dos años después de la muerte de Helen, ella, volvio a la vida. Sin embargo, nunca volvió a ser la misma.Creative Commons (CC) Attribution
1 part