Desde temprana edad Beatriz Diamond descubrió que el mundo estaba infestado de almas rotas.Con tan sólo diecinueve años podía percibir el aura de todo su entorno , deleitándose con el brillo y atemorizándose con la oscuridad que irradiaban las personas. Las noches se vieron invadidas por el insomnio desde que unas inconclusas visiones de un hombre de intimidante estatura la reclamaba como suya, pero , lo más impactante de todo era que no le aterraba.All Rights Reserved