El mundo de los dioses y de los humanos son diferentes. Los humanos, somos personas normales, sin poder alguno, no somos especiales. En cambio, los dioses, son seres inalcanzables, seres mágicos o con dones especiales. Los dioses nos cuidan y nos protegen, o eso es lo que nos han contado desde siempre. Por la leyes establecidas en el mundo de los dioses, los humanos y ellos no pueden estar juntos. Un Dios y una Mortal, eso es algo inconcebido y que no puede ser. Esta regla está impuesta por el dios más conocido de todos, Odín el Padre de Todo. ¿Pero qué pasaría si está regla se incumpliera? Según Odín, habría un severo castigo para todo aquél que la incumpla. ¿Pero qué pasaría, si el que incumple la regla es uno de sus hijos? ¿Qué pasaría, si el Padre de Todo, ve que su hijo menor, el Dios del Engaño se enamora de una chica procedente de la Tierra? Una simple Mortal.
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