Europa, año 1800, en este lugar y tiempo aparecieron cuatro seres montando a caballo que lideraron incontables hordas de seres demoniacos provenientes del infierno que crearon grandes catástrofes en la tierra.
Estos monstruos desencadenaron guerras, pestes, hambre y muerte. Era el principio del apocalipsis.
Las monarquías y gobiernos se unieron para encontrar una forma de combatir a estos seres y formaron "La Comunidad de Naciones Aliadas" y, junto con la asesoría y ayuda del vaticano, crearon un cuerpo armado conocidos como: "Orden de Apóstoles Armados". Un cuerpo de hombres que dedicarían su vida a dar caza a los demonios que anduvieran libres en la tierra y proteger a las personas de ellos en todo el mundo.
La batalla contra los demonios seguía y las hordas demoniacas parecían estar perdiendo terreno, pero la humanidad también sangraba, hubo gran cantidad de bajas, no solo de apóstoles y personas, sino también de animales y vegetación natural, ocasionando que muchas partes del mundo, tanto en Europa como América se volvieran peligrosas áreas desérticas.
Debido a esto, las personas de Europa, para huir del peligro, huyeron al continente de américa en donde había menos de estos soldados demoniacos, pero aun así había, y donde estas criaturas aparecieran, habría apóstoles preparados para combatirlos.
Viserys Targaryen nació con sangre de dragones y, sin embargo, vivió su vida en el exilio. Era un príncipe con un reino perdido y un legado que se desvanecía, un bastardo inmaduro que murió de una muerte lamentable. Desafortunadamente, esa misma muerte me estaba esperando ahora... mientras me encontraba en su cuerpo justo antes de que el oro fundido me fría el cerebro.
Sí. Que le jodan a Khal Drogo y a la corona fundida.
Con los recuerdos de otra vida, en este mundo de traición y juramentos rotos, tuve la oportunidad de forjar un nuevo destino para mí. Armado con el conocimiento del futuro, mi propia astucia y [el Sistema del Dragón], tomé la decisión de huir de los bárbaros Dothraki y recuperar lo que era legítimamente mío.