-... Llego a casa, tengo antojos, me atraco de todo lo posible, vomito sobre la bañera hasta que no quede más en mi y me voy a dormir. Paso mis días encerrada en la confusión, intentando olvidarlo todo, vuelvo a caerme y yo tengo que estar drogada toda mi asquerosa vida. Finjo estar en mi juego, donde la diversión y la felicidad jamás termina..-