"Aquí yo, me quedé solo, pues tras un mundo de mentira sobre mentira, después de tanto logré entrar en un lugar tenebroso, llamado <<soledad>>".
Éste era Rubén Ramírez, un hombre frío, por el cual no había preocupación, pues sin esposa, sin hijos y sin familia, solo un pequeño amigo -el cáncer-. Según a sus palabras, el tuvo que mentir con tal de no llegar a un atroz final.
Excéntrico, millonario, soltero (muy codiciado), pero de presente y pasado, un tanto oscuro.
De infancia "intachable", o eso era lo que el señor Ramírez padre y la señora Carolina Sánchez de Ramírez, a medios y socios hacían creer.
Su adolescencia, un fin se esperaba, al cabo de unas pastillas, su vida ahí acabaría, pero tras ser encontrado inconsciente, otra oportunidad lo esperaba.
Su vida a los treinta daría muchas vueltas, pues al encontrar a su amor de verdad, que después de una tragedia, le sería arrebatado lo único que le hacía feliz, y nada fácil sería. Pues ya así, aquí resurge alguien quien al contrario de hacerlo feliz, logró deshacer toda buena y mala perspectiva, y toda su vida estaría al borde de la tragedia.