Ojos esmeralda, tez blanca como la nieve, hilos de oro por cabello, una figura que al desnudo solo puede representar la mayor de las perdiciones para cualquier hombre y, al mismo tiempo, una forma de ser inocente y firme, correcta sobre todas las cosas pero igualmente inexperta e infantil en muchas ocasiones, la primera vez que la vi pensé que era una idiota, la idiota mas hermosa que jamás había presenciado, pero una idiota a fin de cuentas, ni en mis sueños más salvajes (y e de decir que e tenido muchos) me pude haber imaginado que una chica, no..., una mujer tan opuesta a mi en mas de un aspecto podría volver a hacer latir mi corazón como ya hacia demasiado tiempo que no lo hacia, o más bien que yo no quería que lo hiciera, pero que puedo decir, al final termine enredado en esos cabellos amarillos y en su dulce expresión, jaja... saben puede que no lo parezca ahora pero no es propio de mi referirme a alguien de esta manera mientras mantengo una cara de estupido al babear por una chica, pero ella es especial, lo se suena cliche pero hablo muy en serio y no estaría exagerando para nada si les dijera que ella es una ángel en toda regla...
Sobrevivió a la muerte pero el verdadero peligro acaba de comenzar.
Todos en el reino enemigo deseaban verla muerta, su desaparición significaba el fin de una era... o eso creían.
En lugar de morir, fue enviada al distrito de jinetes, un lugar donde el peligro acecha en cada rincón, y donde su verdadera identidad debe permanecer oculta a toda costa.
Pero no está sola.
Entre traiciones, criaturas indomables y un destino que se cierne sobre ella se encuentra Rigel Heisenbergs: el jinete más letal del distrito.
Su misión es protegerla, pero su mayor deseo es verla destruida.
Cada mirada entre ellos es una batalla silenciosa. y cada paso que da la acerca más a una guerra que podría consumirlo todo.
Un beso, una profecía y una traición que cambiará el curso de la historia.