No entendía el por qué tenían que hacerle eso a aquel chico, él nunca les había provocado, agredido o metido con ellos, es más, aquel pobre y lindo chico de ojos azules como el mar ni estaba interesado en la vida de ellos. Le dolía ver cómo sus "amigos" trataban al chico de lindos ojos azules, aquel chico de ojos de mar.
Pero en esa escuela sólo había dos opciones: uno, dejarte pisotear, o dos... Pisotear a los demás. Sabía que tomaba la dirección equivocada, su madre le dijo que nunca hiciera cosas malas, ni cosas buenas que parezcan malas, mucho menos cosas malas que parezcan buenas. Le dolía tener que hacer eso, le dolía defraudar a su madre, le dolía que aquel chico le tuviera miedo. Y eso, eso es lo que más le dolía a Harry.