No puedo perdonar el tiempo que estamos por perder. No puedo pensar en todo lo que nos quedaba. No puedo seguir haciendo daño donde la razón me condena tras una tormenta que no se calma. Recordemos el principio de esto, donde mi única luz era recordarte en una noche oscura. Vivir con el peso de que no fui la única que tuvo eso, consume mis huesos, me atormenta y me asusta. Me asusta la idea en la que yo pare de ser en quien piensas, me aterra pensar que ya no podrás contarme lo feliz que estás, me duele, me quema, me mata. No sé que sensación sea esta, una confusión de una niña de 16 años, una entrada muy costosa hacia la pubertad, o simplemente una excusa para huir de verdaderos problemas; y que me perdone el cielo si para deseos preferí verte a ti, pero lo que sea que hayas sido tú, no fue nada pasajero, no fue un rato, no fue un momento y mucho menos algo de lo que me vaya a olvidar. No sé que tenías tú, no sé cuanta poesía te di sin que tu supieras leer, no sé cuantos años recorriste por mi cabeza, no sé si estaba haciendo lo correcto, no sé si eras con quien debía hacer lo correcto al final no sé si fuiste la persona correcta, pero siempre supe entonces que eras ese error que quería cometer, siempre supe lo mucho que dolía pero al mismo tiempo no me importaba. Nunca lo sabremos, que la eternidad entre nosotras dos se quedó en un "tal vez" y lo único para siempre de esto será el "que hubiera sido..." el hecho de que cada noche me acostara preguntándome ¿En donde carajos estás? Aparte que en mi corazón, ¿Quien te habrá cegado? Porque la belleza de cualquiera puede marearte los ojos, pero yo sabía como moverte el alma. Al final no sabía que hacer contigo así que preferí aprender que hacer sin ti, y le pedí al karma que no te la cobrara como último gesto de amor.
Creí en el amor a primera vista cuando te vi
Randy y t/n se enamora a primera vista en un fiesta sorpresa pero ambos no quieren aceptar asi que se odian al inicio