"La vida da giros drásticos e inesperados, así que hay que tener agallas para no terminar con ella" Después de que los padres de Sammuel se decidieran mudar al pequeño pueblo en el cuál su papá vivió durante su niñez, Sammuel conoce a nuevas personas con las cuáles tendrá muchas anécdotas, algunas que marcaran su vida de manera emocional. Sammuel al ser un chico de cuidad, tendrá que acostumbrarse a la vida de pueblo, dónde pasarán muchas cosas las cuáles harán que Sammuel tenga que cambiar su manera de mirar la vida y comenzar a tener madurez emocional suficiente para poder lidiar con los problemas y ayudar a una persona en especial para el; para ayudar a Lía.