La única forma que Daniela encuentra de reparar el alma rota de María José es llenando cada una de sus grietas con todos los recuerdos y momentos que la vida ya le arrebató (injustamente) una vez. El problema con eso es que no es la persona adecuada para enseñarle a alguien muerto en vida como volver a sentir. ¿Cómo podría? Cuando todo lo que hace es correr tras un objetivo casi imposible y sabe que su mundo de sombras está más cerca de terminar que de alcanzarlo. [◻Historia pausada hasta nuevo aviso◻].