Hola, me llamo Jimin y cuando estaba en la secundaria mis hormonas comenzaron a volverme loco con los cambios en mi voz, mi cara y también mis gustos culposos. Tenía un vecino llamado Suga con el que solía jugar a diario, una tarde Suga se acercó y nada volvió a ser igual. Suga me dijo que no le dijera a nadie lo que habíamos hecho, pero no puedo aguantarlo más, tenía que contárselo a alguien o contarlo en alguna parte. Ésta es mi historia.