Toda buena historia destinada a quedarse marcada en la posteridad comienza, como es debido, con un romance. Un romance de porte divino, casi inalcanzable por cualquier mano mundana, un romance de mentiras y engaños, una irrealidad fruto de la imaginación que atonta los sentidos y sabe extraño al paladar. Ella también estaba enamorada, más que eso si le dan tiempo a explicarse, perdidamente enamorada de aquella criatura de amarillos ojos con el sol al amanecer, con la seriedad de aquel felino rostro que la noche había cubierto con su bruma. Ella estaba enamorada de aquel hermoso gato negro que con un simple ronroneo le prometía su eternidad. Aquella pequeña pantera, secuestró su corazón y le enseñó la dualidad en la que vivía atrapaba, con aquella sencillez que le presentó el color negro de su pelaje, también la sedujo a abandonar su vida de comodidad e intentar conocer la energía que rige su vida.
Es así como entre la magia del despertar y la incredulidad del desconocimiento, se alza orgullosa la eternidad del gato negro.
Season 4 of The Virus Within
Trinity is familiar with zombies, being one herself, but when strange zombies start appearing, she realizes that the world she knew might be changing yet again.
When a dangerous set of scientific notes are discovered, Trinity and her friends don't realize anything is wrong until a frantic radio call comes in. Unaware of the notes, they race to the south and struggle to determine where the strange zombies came from. The zombies are unlike any ranks previously seen, and they aren't as predictable. Some have new tricks hidden up sleeves, forcing any Stronghold they encounter to quickly adapt to the new challenge or risk being overrun. Secrets never remain hidden, and zombie apocalypses never make life easy.