Corría, corría tan rápido como podía, la herida en su costado le dificultaba las cosas, se estaba desangrando, pero no le importaba, con chakra curativo paraba el sangrado de a poco, pero no le estaba prestando mucha atención a eso, ella estaba buscando a la persona más importante en su vida. El que siempre la apoyo, el que la sacó de sus momentos tristes, y que cada vez que lo veía no podía evitar sacar una sonrisa.
-𝘕𝘢𝘳𝘶𝘵𝘰. -Sus pensamientos se veían invadidos por ese rubio, la preocupación estaba que se escapaba de su cuerpo, esperaba que este bien, no sabría que hacer si sucediera lo peor.
Escucho un grito, reconocería esa voz donde fuera, aceleró el paso tan rápido como pudo, se acercaba cada vez más, los gritos se hacían cada vez más fuertes, al llegar abrió los ojos horrorizada. Ahí, justo frente a sus ojos, estaba la persona que ella tanto amaba.
-¡Naruto!. -El rubio abrió sus ojos con miedo, apenas y tenía aliento para hablar.
-S-Sakura-chan,... No vengas,por favor.. No le hagas nada. -El rubio hablo con todas sus fuerzas primero a ella, y luego a la persona que lo tenía en agonía.
-Je, así que esta es la chica que te trae loco ¿eh?. -Dijo el enmascarado para luego mandar a volar al rubio hacia un lado.
-Tu.. ¡Bastardo!. -Ella se abalanzó al enmascarado con las últimas fuerzas que le quedaban, el contrario solo esquivaba los golpes con facilidad, y de un solo movimiento sacó un kunai y lo dirigio a su cuello.
-¡Sakura-chan!.
...
Abrió sus ojos, se encontraba en una habitación. Se sentía algo baja para estar durmiendo en una cama, se sentó y miró la habitación, era de estilo japonés, ¿fue un sueño?, miró sus manos, sus ojos se abrieron como platos, sus manos, antes feas y con cayos, ahora eran suaves, no tenían ni rastro de alguna cicatriz, y lo peor de todo, eran pequeñas.
-¡Hermana!. -Miró a su costado y vio a un niño bicolor entrar en la habitación-¡Fuyumi-neesan llama para el
𝗗𝗼𝗻𝗱𝗲 Nari está cansada de una vida vacía, sin emoción ni propósito. Sin familia, amigos o metas que la motiven, deciden unirse al Juego del Calamar buscando algo que rompa con su monotonía.
𝗢 𝗱𝗼𝗻𝗱𝗲 Nari recibe la misteriosa invitación al Juego del Calamar, acepta sin dudarlo, ignorando los riesgos. Lo que no imagina es que, en medio de esos juegos clandestinos, encontrará un nuevo significado para la felicidad.
(Player 120 x Fem!Oc)