La sociedad nos da siempre dos opciones ¿Te arrodillas o no? La más fácil es definitivamente la primera, la más usada también. La mayoría de los mundanos se nutren diciendo que ellos no escogen la más fácil, se sienten bien por ser rebeldes, por ir en contra de la corriente. E intentan siempre arrastrar al resto. A mí nunca me ha molestado arrodillarme o bajar la cabeza, después de todo no tengo por qué luchar, no tengo un lugar al cual querer llegar mientras me enfrento a la tormenta. Que no me importe no quiere, claro, decir que me gusta. No le presté atención a nada de esto hasta que llegó el momento en el que disfruté arrodillarme. No frente a la sociedad, solo frente a él. Nada más placentero que plantar mis rodillas al suelo por él, nada mejor que ser el irremediable centro de su mirada penetrante. Que sus reflectores me vuelvan lo único existente en el mundo una vez a esté en el suelo solo por él, solo para él. ¿Qué tiene de diferente Jeon Jungkook? Que él no me dió opción, cuando no quería ver apagó por mí las luces vendando mis ojos. Cuando quería gritar hasta reventar mis propios tímpanos, amordazó mi boca y reemplazó los gritos de dolor por gemidos de placer. Pero lo más importante es que agarró mi mano cuando una vez más quise escapar a lo fácil. Esposó mi mano a la suya, encadenó mi alma a la suya... Pero esta historia no es precisamente de nuestro comenzar, porque lo importante no son los empezares, contaré lo que el resto tacha con un "Vivieron felices por siempre" Enterraré como estaca en tumba nuestro eterno y no por sádico menos dulce FINAL. °°°°°°°°°°°°°°°° Advertencia: Contenido +18 Usted leerá esto bajo su propia responsabilidad, la historia está escrita sin bienes de lucro, todo parentesco con otra es pura casualidad y la intención no es faltar el respeto a nadie. Los que sabiendo esto permanecen aquí. ¡Disfruten la historia! Ganadora de los Vkook Awards 2020 Categoría O