- ¡No puedes venir a decirme eso, Daniela! - grite dolida - nunca te di motivos para que lo hicieras - la mire y en sus ojos veía arrepentimiento - Poché, yo lo siento mucho, pero de verdad, me di cuenta de que solo te amo a ti, dame una oportunidad y te juro que todo va a ser mejor que antes - junto sus manos en señal de súplica mientras se acercaba a mi - Puedes irte al carajo - me aleje queriendo no saber más de ella Aunque, sabía que si ella me buscaba, tal vez volvería a caer en sus brazos.