Siempre pensé que la primera vez que cayera en las garras del amor sería con el típico chico celoso, arrogante, mujeriego y vicioso. En resumen, tóxico. Pero no fue así, me enamoré de un chico con un sentido del humor tan agrio como el limón, distraído y un poco... Cobarde, al menos en todo lo relacionado con parejas formales. Me duele el corazón al pensar que lo "abandoné", en un intento de dejar la rara Dove atrás por la asombrosa y bella Dove que la gente ve en mí ahora, gracias a una simple mordida. Pero por una situación realmente complicada su vida corre peligro, peligro que nos llevo a una realidad donde el tiene alas de ángel y no recuerda absolutamente nada. Prohibida toda copia parcial o completa de mi historia. Apesar de que esté en proceso.
10 parts