El amor. Muchos dirían que el amor es bueno, sincero. Otros, que te hace perder, perder aquello que más aprecias y que has estado cuidando y protegiendo durante mucho tiempo. Ese es el caso de un desdichado marido, que, tras perder a su amor, no descansará. La ira de un nuevo asesino florece, y con el, también florecen las ansias de matar. Pero no matar a cualquiera. De matar, a las personas que le arrebataron a su amor, a las malas influencias con las que se relaciona su amor. ¿Quien osará hacerle frente a este justiciero? Cuatro héroes emergen de la comisaría 14. Sus nombre: Christine, la capitana, Jack y Miles, sus ayudantes, y Chloe, la forense. Pero, sus planes serán frustrados por aquel ser justiciero que hará lo que sea, por librar, no sólo a su amor, si no también del mundo a aquellas veintitrés personas escogidas.
Rebecca Armstrong no concede deseos. Cobra deudas y esta aquí para reclamarme.
Todo lo que quería era recuperar a mi hermanito de la mujer que se lo robó .
Mi familia esta en deuda con Becky, una mujer a la cual odian, y me repudian cuando los ojos del diablo se desvían hacia mi. Ahora no hay nada ni nadie que me proteja de la mujer cruel que dirige esta ciudad desde las sombras.
Pero Becky no me va a arrastrar por el pelo todavía. Ella me va a atormentar primero.
Becky exige que juegue sus retorcidos juegos. Ella piensa que me desmoronaré para su diversión, pero llevo un secreto que es mas grande que nosotros dos. Un secreto que ahora esta en manos de la peor mujer posible.
Todo lo que anhela soy yo. Todo lo que exige es todo. Becky me dará todo lo que siempre eh querido; todo lo que tengo que decir es "deseo que"...
Pero un deseo es una maldición cuando lo concede el mismísimo diablo.
Becky G!p