"Me he tomado también tu taza de café. Ya casi no tengo azúcar pero me acordé que a ti te gusta amargo. Sabe muy feo, como ésta soledad. Como éste estar deseándote a todas horas." Con un nudo en la garganta y un mar de lágrimas me sumergo en sus palabras que me llenan de amor y dolor. «Pequeño mío» ¡Hola lindura! Espero que te guste esta historia, perdona lo principiante que soy por favor. Gracias:3 *Actualizaciones lentas.