La vida tiene altos y bajos, nos enseña a que todo puede acabar en un abrir y cerrar de ojos, nos quita lo que más queremos sin darnos tregua para poder recomponernos.
Ella es inestable, él es pasional.
Ella se lleva al mundo por delante, sin pensar en todo el daño que provoca con solo hablar, no le importa la vida de las personas, porque a ella le arrebataron su única razón por la cual seguir existiendo.
Él es un chico lleno de buenas intenciones, cálido y atento, le importa demasiado la vida de la gente que lo rodea, a pesar de que lleva siempre el realismo como su caparazón.
Son polos opuestos, ella lo detesta, él intenta amarla, y creen que ninguno de los dos se entiende, pero son más parecidos de lo que ellos mismo podrían aceptar.
Aunque, ese Beso Bajo Miles de Estrellas, les podría cambiar la vida en un abrir y cerrar de ojos.
Andy siente que todo le sale mal: acaba de ser rechazado por la chica que le gusta y necesita ayuda urgente para aprobar sus exámenes o tendrá que recursar en las vacaciones de invierno. Para colmo, su madre le consigue el peor tutor de todos: Edward, el chico más grosero, antipático y con fama de ser homofóbico. El escenario no podría ser peor.
Sin embargo, con cada tutoría, descubre que Edward es todo lo contrario: es amable, divertido y está secretamente enamorado de otro chico de la escuela.
Andy, al descubrir que Edward no es lo que todos piensan, decide ayudarlo con consejos de conquista a cambio de las tutorías, no obstante, a medida que pasa el tiempo, la relación entre ambos se fortalece. Mientras Edward sigue los consejos de Andy y parece que está conquistando al chico que le gusta según sus propias palabras, Andy comienza a cuestionar sus propios sentimientos.
¿Podrán conseguir la conquista perfecta o descubrirán que el amor verdadero está más cerca de lo que imaginaban?