-Isbel, te he deseado tanto- dice llegando hasta donde me encuentro y acorralándome en una de las esquinas de la ducha -Harry, aléjate por favor- digo poniendo mis manos extendidas en forma de alto -Ya no puedo, Isbel. Te necesito- su cuerpo aprisiona al mío, no tengo escapatoria, voy a morir Sus manos se dirigen a mi rostro y sin dudarlo estampo mi mano en su mejilla así mismo tratando de salir por uno de sus constados pero solo provoco que de un solo movimiento su mano se enrolle en mi cuello y me estampe de espalda contra la pared. Un quejido se escapa de mi boca -¡IMBÉCIL!- digo tratando de quitar sus manos de mi cuello, pues siento que el aire empieza a hacerme falta El me mira fijamente, ninguna emoción se refleja en su rostro Dejo caer mis manos, la debilidad se apodera de mí, manchas blancas y negras empiezan a aparecer y mi vista se vuelve nublada. Moriré en manos de un demonio, de mi marido De repente me suelta haciendo que caiga al suelo, intento con desesperación respirar lo más que puedo, la falta de oxígeno me hace toser repetidas veces Sin darme tiempo a respirar me toma de la cadera elevándome a su hombro para salir de ahí -¡Bájame! ¡Harry, detente!- logro articular pero él hace caso omiso a mis palabras Soy arrojada a la cama como un vil costal de patatas. Anulando la oportunidad de que pueda huir se sube rápidamente inhabilitando el movimiento de mi cuerpo Toma mis manos y con una sola envuelve mis muñecas sosteniéndolas por encima de mi cabeza -¡Harry qué haces!- digo intentando sacarlo de encima de mi -Lo que he querido hacer desde nuestra primera noche juntos- dice aspirando mi cuello y pasando su lengua por este mismo ***** -Antes de leerla deben saber que contiene escenas fuertes tanto de violencia como de sexualidad.All Rights Reserved