En su regazo un niño de cabellos dorados movía sus caderas en un torturador vaivén lento.
ㅡVamos papi, enciende otro.
El maldito era su puta perdición.
Sign up to add drugs | kookmin to your library and receive updates
or
En su regazo un niño de cabellos dorados movía sus caderas en un torturador vaivén lento.
ㅡVamos papi, enciende otro.
El maldito era su puta perdición.
" Me cuesta entender lo mucho que cambió mi vida, me ha vuelto alguien liberal, me ha vuelto un esclavo de su seducción, jamás había visto a un hombre como el. Me tiene hechizado con su voz, su olor...