Cuando despertó le dolía la cabeza de tanto llorar, y no fue hasta que escuchó sollozos que no eran suyos que vio a Louis. Estaba sentado al borde de la cama. Su rostro enterrado entre sus manos mientras lloraba. Y la libreta de canciones de Harry a un lado. Mierda. - Lou...-Su novio volteo con los ojos y la nariz roja. Su mirada se veía dolida y Harry solo quería ir hasta él y tenerlo en sus brazos hasta que dejara de llorar. - ¿Así es como te sientes Harry? ¿Crees que somos dos fantasmas? El rizado sentía unas inmensas ganas de llorar, no precisamente por que estuviera a punto de pelear con Louis, sino porque justamente así se sentía. Sabía que lo que estaban viviendo eran solo los restos, el fantasma de lo que fueron. - ¡MIERDA HARRY, CONTESTA! ¿Esto es lo que crees que somos? - Louis ya estaba de pie, dando vueltas en la habitación intentando controlar el enojo y el dolor que sentía. - No Lou, no lo creo. Lo sé - bajó la mirada, sabía que era el momento de hablar. De sacar toda la mierda que ambos sentían y creían. Pero el rizado sabía que si veía por un segundo los ojos de su novio no iba a poder hacer nada más que correr a sus brazos y pedirle perdón por cualquier cosa. - Sé que ya no somos lo mismo, sé que esto está jodido. - ¿No... no me amas más? - Ver a Louis tan vulnerable le dolía en el alma. - Te amo Lou, mierda te amo más que a mi vida. Pero eso ya no es suficiente y lo sabes. O la historia detrás de two ghosts