Primera ley de la magia

«El día amaneció en Concordía rojo carmesí con nubes naranja pastel. Lo recuerdo perfectamente. Mi memoria visual es buena. Muy buena»

Escribió Elysia en su diario, tenía la manía de escribir en pretérito perfecto simple aún cuando habían pasado apenas un momento. Como si los hechos hubiesen ocurrido hace mucho tiempo.

«Mi madre me levantó a las 6:50. Eran las 7:00 cuando me duché entre una mampara y una pared con una pequeña ventana. Yo, claro, estaba desnuda. Esa ventana aún estando cerrada hacía que me sintiera expuesta, desnuda. Siempre he sido vergonzosa. Y... Ya. No tengo nada más que decir por hoy: no he hecho nada más que sentarme a escribir. Ayer no tuvo nada de interesante. De hecho,ayer solo escribí sobre el cielo. Si miras atrás en el diario descubres que siempre empiezo describiendo el cielo. Las nubes en el amanecer de ayer eran esponjosas y al cielo claro lo cubría un velo rosa. Me gusta empezar mis entradas en el diario por el clima(o el cielo, según como se mire) En la tierra hay demasiados muertos enterrados.