Los celos lo cegaron, el miedo de perder a esa persona que tanto amó lo invadían. Por más que quería hacerse de la vista gorda no lo podía olvidar. Esos problemas son internos y si los suprimes por mucho tiempo llega el momento en que salen y atacan al quien no quieres lastimar. O también te llevan a cometer una locuras que te harán arrepentir después.