Cuando el mal reina, la tierra sufre. El mundo llora. Y la humanidad muere... El mal fue liberado y su intervención empezó a atacar el mundo, pieza por pieza, cada día algo diferente ocurre, cada día una nueva catástrofe se desata. La legión de ángeles espera, el mal tiene permiso de hacer su voluntad por cuarenta y dos meses y mientras este tiempo transcurre la humanidad sufre, se desploma, todo aquel que quiera vivir muere. La humanidad sangra y no hay cosa que sepan hacer para librarse de las garras del mal, aquellos cuyo nombre están escritos en las páginas del libro del cordero conocerán la salvación, los demás no tienen más remedio que hundirse en el fuego del infierno, a menos que los seres divinos decidan intervenir.