Buckley está hipnotizado, intoxicado al calor del momento. Anhela esos labios. Sus manos enmarcan el rostro del moreno, acaricia su barba y sonríe anonadado en la peculiar belleza de Díaz. Su rostro avanza, se mueve imperturbable en busca de aquel contacto prohibido que se siente como una brisa nocturna cuando roza la boca del moreno. Oneshot EddiexBuck 9-1-1