Yo no sé que hacer conmigo, estoy cansado. Estoy harto, me doy asco, me odio. Necesito escucharte, necesito que me digas que todo estará bien. Necesito respirar, quiero huir. Por favor, Dios. Dame fuerzas, quiero morir. Pero estoy asustado, soy un cobarde. Por favor, ayúdame. Me estoy hundiendo.