Durante cientos de años, Wei WuXian, el Dios del placer, del sexo y de todo aquello ligado a la oscuridad ha estado contenido bajo las montañas impenetrables de Luanzang, donde las almas no se atreven a entrar a menos que busquen la muerte o sean devoradas por el incansable apetito del Dios. Cada cierto tiempo, el deseo de WuXian debe ser aplacado, para que su energía no sea liberada de las profundidades de la tierra y el mundo no entre en caos como en el pasado. Pero en esta ocasión... El elegido no es otro que Lan Yuan, el hijo mortal de Lan Zhan, el Dios de la música, del conocimiento y de la Luz, cuya llegada siempre se haya marcada por un camino de orquídeas blancas floreciendo a sus pies.
Para salvar a su hijo, Lan Zhan deberá internarse en las profundidades de Luanzang para visitar a WuXian y tratar de contener su ira, aun si eso se trataba de perder su alma en el proceso.
Pero el pasado es imposible de borrar, y los sentimientos enterrados durante tanto tiempo regresan una vez más, y al igual que una orquídea manchada por la sangre de una herida sin cerrar, la oscuridad y el dolor se cernirá sobre todo lo bello que existe, y ambos tendrán que enfrentarse nuevamente, enfrentar el pasado y el futuro que se abre ante ambos.
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Traigo ahora la segunda historia que he creado a partir del maravilloso universo de MDZS. Los personajes no me pertenecen, sino a su autora original, MXTX.