-Gracias- dice él después de que todos se retiraran-. Estaré eternamente agradecido contigo-agarra mi mano-, porque fuiste la luz es mis más oscuros días, fuiste la felicidad en mi triste vida, fuiste el ancla que necesitaba para aferrarme a tierra firme cuando mi mundo se desmoronaba, fuiste mi fuerza cuando me sentía desmayar.