Esos imbéciles, me quebraron, partieron mis ilusiones y sueños, deformaron mis pensamientos, estoy trastornado, me siento enfermo con la ansiedad de querer aniquilar a todo estúpido estereotipo con complejo absurdo de Dios, estoy roto, tener las manos bañadas en sangre nunca se había sentido tan bien, la adrenalina de estar en constante peligro de saber que todo puede terminar si me atrapan, es no sé ¿Emocionante? No tengo miedo a la muerte, tengo demasiada impotencia acumulada dentro de mí, me importa una mierda que es correcto y que no lo es, ya no creo en esas mierdas de la justicia, el karma, ni el equilibrio, solo sé que seguiré haciendo esto, todos ellos son culpables, no miden sus malditas acciones, provocan suicidios, autoflagelación y depresión a otros creyendo que nunca les pasará lo mismo o algo peor, no soy ningún héroe, ya esas fantasías murieron, mi imaginación y carácter infantil desapareció, las únicas sonrisas que expresa mi rostro es al ver a un maricón que se cree poderoso, suplicar por su vida y la de los suyos pensando y creyendo que tengo piedad, a estás alturas sé perfectamente que si esto acaba, será conmigo muriendo y siendo olvidado.
"Todo fue tan espontáneo, tan natural, que ha ninguno de los dos nos pareció raro que, de pronto, mi mano estuviera en su mano y que nos miraramos a los ojos como dos tontos."
_Mario Benedetti