La única cosa que evitó que acabara con mi vida durante todo este tiempo fue el poder desahogarme con mi libreta y mi bolígrafo. A veces, durante las tardes de familia, otras a las 3 de la mañana con la luz apagada, los pensamientos se volvían cada día más recurrentes a la vez que peligrosos. Hoy, miro al pasado y veo una versión distinta de mi en todos los aspectos. Si bien es cierto que los pensamientos no se detienen, yo tampoco lo hago. Hoy estoy en lo más bajo, mañana estaré en la cima.
Los párrafos de estos textos reflejan mis ideas y pensamientos a lo largo de estos 3 años, lo que pensaba en aquel entonces y de cierta forma la evolución que he conseguido siguiendo el mantra de mi vida: "mañana será otro día..."
Lamento el burdo intento de redacción que se refleja en éstas páginas, pero espero que les agrade o que al menos los entretenga.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...