historia surrealista que nos muestra como hemos pensado en nuestros sueños y momentos libre que hemos llegado al mismo pensar su vida y de este mundo. En silencio sentía sus carnes acaloradas por el deseo, la recorría excitado siendo necesario eyacular, una y otra vez rememoraba, hasta que supo que debía dejarla en el olvido porque ella lo había dejado para siempre. En una noche y en un sueño la recordó, se besaron una y otra vez con furia y con ganas, era el reencuentro que no habían tenido por culpa de la muerte,