Solo existen diez alfas pura sangre capaces de transformarse en su parte animal alrededor de todo el mundo, son una especie superior en peligro de extinción y es por ello que las altas esferas quieren darles caza, torturarles a cambio de información, experimentar con ellos e incluso tener diversión. Actúan como los demás, se comportan como los demás, viven entre los demás, pero no son como ellos y las pequeñas marcas de nacimiento, como si de un tatuaje se tratase, con sus respectivos números en el centro de sus pechos son una clara muestra de ello, un recordatorio de que no son como los demás y que están en continuo riesgo y peligro. Deben estar en constante alerta y no llamar la atención. Deben mantenerse en el anonimato, no levantar sospechas...