Por culpa de su hermano, la dulce Wendy termina viviendo en casa de Alex, el chico que no ve desde niños y que, para ella, tiene los ojos más hermosos que ha visto. Wendy sabe desde el principio que Alex le traerá problemas, y cuando la cosa empiece a complicarse, ¿quién va a estar realmente para ella? Las mentiras y los engaños formaban parte de su vida antes de mudarse, y se llevará algunas sorpresas al darse cuenta de que nunca podrá huir de todo eso que tanto odia. Acompañemos a los protagonistas en esta historia llena de emociones y sintámonos completos. *** Queda prohibida la copia o adaptación de esta historia.