Para mí la presencia de Dios es tan cálida, como tomar un buen café, un dulce café... Y eso es Dios en mi vida, dulzura. Este libro es mi diario devocional, lo compartiré contigo esperando que la Palabra de Dios transforme tu vida, cambie tu perspectiva y te aliente a seguir adelante. ¡Espero lo disfrutes! Dios te bendiga.