Chuya quería relajarse en su apartamento después de un día muy largo y cansado, pero para su sorpresa alguien estaba en su apartamento, Dazai Osamu estaba ahí acostado en el sofá como si de su casa se tratase, Chuya no estaba de ánimo por lo que optaría por echarle a patadas, pero una botella de vino cambiaria su parecer, aunque no solo eso haría después de todo, por solo una vez más que se dejara llevar por sus instintos gracias a la borrachera no pasaría nada ¿verdad? A.u. Los personajes de Bungou Stray Dogs no me pertenecen, solo los tome para esta historia. Pertenecen a Kafka Asagiri y Sango Harukawa Las imágenes usadas para la portada y en la historia no son de mi autoria, todos los derechos a sus respectivos dueños.