Berlín 1944 Las melodías suenan. Jimin está tocando el piano con todo su corazón, de hecho, está tocando la última canción con la cual murió y resurgió de las cenizas como un fénix. Ha permanecido oculta de los alemanes que han estado en guerra, asesinando, acribillando y transportando a los judíos por dos años. Dos eternos años. Jimin odia a los alemanes, cada día reza para que todos sean condenados al infierno sin perdon alguno, sin embargo, cuando su identidad se ve amenazada por un temible soldado, Jimin no le queda más remedio que someterse a la voluntad del esbirro con el objetivo de poder matar al mismo hombre que mató a su familia. ¿Podrá lograrlo?