En un pequeño pueblo donde los rumores rondan cada dos segundos, existe una banda apodada como "Leones". Eider sabe perfectamente que por linaje de familia debe unirse a ellos, teniendo que pasar por diferentes desafíos que podrían llegar a perjudicarla tanto física como mentalmente. Jungkook, sobrino del líder de los Leones, pareciera no tener interés en aquellas miradas silenciosas por parte de la porrista. Podría decirse que incluso llegaba aborrecer el sentirse acosado en cada rincón o pasillo de la escuela. Por temas académicos, ambos quedan envueltos en una situación donde deben convivir más tiempo del usual, tiempo en el que Eider descubre que Jungkook puede llegar a ser un dolor de cabeza, o un chico que le guarda un secreto tan grande de su pasado que podría llegar a decidir el futuro de ambos.