Cuando un proyecto de grupos les toca hacer, Antonella y Michelle descubren quienes son socios y quienes son amigos. Antonella se deja llevar por un amigo con un dulce conducto, pero aunque sean una pareja tallados por el mismo Dios, eso no significa que no se les caigan las alas alguna vez. Michelle se da cuenta de que el amor que anhelaba había estado en los ojos de un amigo de la infancia. Entre celos, engaños, fiestas, y escuela, la clase se obliga a enfrentarse con ellos mismos en esta historia llena de drama.