Elizabeth sabía que su hermano menor era un chico que tan sólo quería enamorarse. Los problemas vinieron después de que la definición de "amor" para su hermano se convirtiera en sinónimo de Sophia. Sophia fue una maldición que arrastró a Elizabeth, a su hermano y a su pareja, Oliver, fuera del país, obligándolos a experimentar una vida nueva en un entorno diferente. El problema viene cuando el hermano de Elizabeth descubre la conveniencia de Sophia de estar con él.